El rencor es maravilloso

Gracias al rencor a prueba de olvido no se me olvida. No te me olvidas. Y sigo pensando que tal vez en otra vida hubiese sido mejor hacer lo mismo para volver a empaparnos de esas gotas sin amor. Y volver a tomar helado un lunes por la noche a -3º bajo cero o atrancar súbitamente los ascensores. Jugar al pilla pilla con las persianas bajadas, ¡arriba las sábanas!. "Eres el mejor pirata que he conocido nunca" me decías y yo te respondía que sabía que en esta ciudad habían escondido un tesoro y que si querías unirte a mi tripulación. Teníamos que encontrarlo. Así que aventureros nos volvimos, rinconeros.Y todo dentro de una misma habitación.

El amor estaba claramente de más, tal vez por eso nos acabamos acercando tanto. De tanta nada que teníamos se completó el todo. Y todo sin amor se cerró el ciclo entonado en la "d" de distancia, con una última inundación de "buenos días" y una patada en tus magníficas posaderas.

¿Y quién dijo que el rencor era malo? El rencor es maravilloso.

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